El rayo detuvo el corazón de la víctima; además, el impacto provocó dañó los órganos internos y la dejó con graves quemaduras
Una mujer británica, de 48 años de edad, se encuentra luchando por su vida luego de ser golpeada por un rayo frente en una playa de Croacia. Los hechos ocurrieron el pasado sábado en una playa cercana a la ciudad de Split, al sur del país, cuando la víctima vacacionaba con su hija.
De acuerdo con el testimonio de algunos testigos, la mujer fue golpeada por un fuerte rayo cuando, junto con su hija, intentaba llegar a una zona de seguridad de un hotel cercano.
El rayo detuvo su corazón, dañó los órganos internos y la dejó con graves quemaduras. La mujer, quien no quiso ser identificada, quedó inconsciente instantáneamente por el golpe de 300 millones de voltios que sufrió.
Luego de los hechos, testigos que presenciaron la escena y escucharon los gritos de la hija corrieron al lugar para ayudar a la víctima. La mujer fue auxiliada por un médico que estaba de servicio en un evento de triatlón cercano; el especialista de la salud logró resucitarla después del impacto.
Luego de recuperar el conocimiento, la mujer fue trasladada de urgencia al hospital más cercano en la ciudad de Split, donde aún permanece en estado crítico con heridas en la cabeza y quemaduras.
De acuerdo con medios locales, los médicos que están tratando a la mujer en el hospital aseguraron que «sufrió un paro cardíaco debido a la caída de un rayo«. Agregaron que, por fortuna, «la reanimación comenzó de inmediato en la playa y continuó en la ambulancia».
Por su parte, la doctora Mileva Frankic, que también atiende a la mujer, informó que en el hospital «están monitoreando a la paciente y lamentablemente su vida aún corre peligro«.
“Además de las quemaduras que esperamos por el impacto de un rayo, también hay cambios en varios órganos que son las consecuencias del impacto y del paro cardíaco”, agregó la especialista.
Por estos hechos, una portavoz de la policía de Croacia pidió a los turistas que durante las tormentas eléctricas salgan del agua inmediatamente y se dirijan al edificio más cercano; deben evitar esconderse debajo de un árbol o en una tienda de campaña.
