El asesor presidencial en Asuntos de Presos Políticos y Sociales, Pedro Joaquín Amador, reveló que junto a la bancada de diputados del Partido Libertad y Refundación (Libre), trabajan en un proyecto de ley de Indulto General, para descongestionar las cárceles, especialmente para las personas que han cumplido los requisitos de preliberación o la mayoría de su pena.
“Hay personas que se están muriendo y ya no deben estar en los centros penales. Las cárceles de mujeres hay una sobrepoblación de casi mil féminas cuando la misma solo está diseñada para albergar al menos 300”, explicó Amador.
Ante el hacinamiento de reclusos, el funcionario pidió a todas las bancadas del Congreso Nacional analizar el tema de la Ley de Indulto General para descongestionar un poco los centros penales del país.
Según el funcionario, con la Ley de Indulto General estima una reducción entre un 30 o 40 por ciento de la cantidad de reclusos para delitos comunes y no para los graves, a menos que la persona haya cumplido la condena y no ha logrado salir de prisión.