En coordinaciones entre la Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado (FESCCO) de la Regional Norte y la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), Zimri Bezai Cruz Olivera es trasladada hacia San Pedro Sula para que comparezca ante el juez competente a audiencia de declaración de imputado.
Contra la encausada se pedirá la medida cautelar de detención judicial, luego que un equipo de agentes de apoyo estratégico, operaciones especiales y comunicaciones de la ATIC le dieran captura la tarde de ayer a la altura de la aldea Télica de Juticalpa, Olancho, cuando provenía de la ciudad de Tocoa, Colón, de donde es originaria.
Los delitos que se le imputan a Zimri Cruz son tráfico de drogas agravado y asociación para delinquir, siendo considerada como parte de una organización criminal de distribución de marihuana desmantelada el pasado 13 de junio durante la Operación Zamora.
Como se recordará, por este caso guardan prisión por los mismos delitos, Ovando Echeverry Martínez Turcios, su hijo Justin Alessandro Martínez Barahona y Adán Nufio, detenidos en el municipio de Tocoa, Colón.
Asimismo, Rosa Mirian Ochoa Maradiaga y Luis Alexander Varela Ochoa capturados en Choluteca, Bairon Yonatan Dubón Romero arrestado en Comayagua y José Mauricio Alvarado Mejía aprehendido en Támara.
La Operación Zamora entre otros resultados dejó 105 aseguramientos de bienes de origen ilícito (37 inmuebles, cinco sociedades mercantiles y 63 vehículos), el decomiso de 12 libras de supuesta marihuana, tres armas de fuego, 644 municiones, más de 85 mil lempiras, 460 dólares y 82 cabezas de ganado.
La organización criminal desarticulada tenía su centro de operación de cultivo y producción de marihuana, mucha de la variedad más potente denominada “tiburón”, en zonas montañosas de Tocoa, Colón, entre ella la aldea Zamora (principal área) y otras como Chiripa y Concepción, no obstante, la distribución del estupefaciente se extendía hasta los departamentos de Olancho, Francisco Morazán, Comayagua, El Paraíso, Choluteca e incluso a Nicaragua.
A los trabajos de inteligencia a cargo de fiscales de la FESCCO y de agentes del departamento contra el crimen organizado de la ATIC, se sumaron miembros del Centro Antipandillas Transnacional (CAT) certificados por el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), puesto que en la investigación se detectó que la droga llega a manos de maras y pandillas quienes controlan la venta y reparto.
Previo a la Operación Zamora, la FESCCO y la ATIC ejecutaron 21 acciones antidrogas de agosto de 2021 y junio de 2022, que permitieron el decomiso de 1.2 millones de lempiras y la incautación de 40,264 libras de marihuana que equivalen a 19 toneladas, valoradas en más de 40.2 millones de lempiras, además de la captura infraganti y procesamiento de 40 personas por tráfico de drogas agravado y el decomiso de 28 vehículos, entre turismos, pick up, camiones y rastras.
La FESCCO y la ATIC identificaron ocho distintas modalidades de trasiego para esconder la droga, tal como se evidenció en los 21 decomisos efectuados: compartimientos falsos en vehículos pesados y medianos, en baúles de carros turismos y encaletados en camas, armarios, tablas yeso, llantas y cargas de naranjas y cocos.