Se reportó que el punto de taxis de la colonia Sagastume en Tegucigalpa, cerró sus operaciones debido al flagelo de la extorsión.
Cabe mencionar, que son al menos 26 transportistas los afectados por el cobro del “impuesto de guerra”.
Asimismo, a través de teléfonos celulares, los transportistas fueron amenazados y por miedo, tomaron la decisión de no trabajar hoy.