Un hombre murió de un fulminante paro cardiaco en la capital.
El ahora fallecido laboraba como guardia de seguridad, y en un rato libre se puso a jugar pelota sin imaginar que sería su última «potra».
Tras caer al suelo luego de sufrir el ataque al corazón fue llevado a un centro asistencial pero no se pudo hacer nada para salvarle la vida.
El ahora fallecido respondía en vida al nombre de Javier Villatoro.