Los precios del gas se dispararon después de que Rusia recortó aún más el suministro de gas a Alemania y otros países de Europa central.
La medida surgió después de que Moscú amenazara con recortar el suministro a principios de esta semana.
Los precios del gas en Europa subieron un 9%, cotizando cerca de su máximo histórico previo después de que Rusia invadiera Ucrania.
Los críticos acusan al gobierno ruso de utilizar el gas como arma política.