El presidente ruso, Vladimir Putin, amenazó con aplicar una nueva reducción de los suministros de gas ruso a Europa a través del gasoducto Nord Stream 1, según declaraciones ofrecidas a periodistas rusos en Irán.
Putin dijo que el flujo de gas natural ruso a los clientes europeos ha disminuido «por culpa de Occidente» y advirtió que podría seguir disminuyendo.
Su declaración aumentó la presión sobre la Unión Europea, que teme que Rusia pueda cortar el gas y causar estragos económicos y y políticos en Europa durante el invierno.
Putin, quien asistió en Teherán a una reunión con sus pares de Irán y Turquía, dijo que la cantidad de de gas bombeado a través del gasoducto Nord Stream a Alemania es de 30 a 60 millones de metros cúbicos al día, es decir, una quinta parte de su capacidad si no se sustituye rápidamente una turbina.