Flores, rostros desconsolados, lágrimas y la esperanza que las autoridades policiales hagan justicia y encuentren a los culpables de una masacre que se registró en Puerto Cortés.
«Él era bien bueno conmigo, no le pido nada a las autoridades», dijo la abuela de una de las víctimas.
Los familiares aseguraron que nunca creyeron estár en un escenario tan horrible e impensable, ya que aseguran que los jóvenes ahora fallecidos, eran trabajadores.
Bairon «El Flaco» Y Christian Figueroa, fueron las víctimas que fueron sepultadas.
