Trinidad Ayala, originario de la capital, es uno hondureño que tras más de tres décadas en los Estados Unidos es propietario de una venta de automóviles usados en San Antonio, Texas.
Ayala ha logrado el «sueño americano» donde también tiene a otros compatriotas laborando.
Ayala detalló que primero se ubicó en Florida sin embargo unos cinco años después se trasladó a San Antonio en el estado de Texas donde radica desde hace 27 años.
relató que la mayoría de sus clientes son catrachos, «son buena paga», aunque siempre hay uno que otro irresponsable, pero es la excepción, apuntó.