Misuri ha tomado la decisión de prohibir el aborto en su territorio, convirtiéndose así en el primer estado da este paso, minutos después de que la Corte Suprema fallara a favor de anular el fallo del caso Roe contra Wade, que desde 1973 reconocía que la Constitución protege la libertad para interrumpir el embarazo.
«Es un día colosal para el carácter sagrado de la vida», escribió en su cuenta de Twitter el fiscal general para Misuri, Eric Schmitt, que calificó el fallo de «increíble victoria».
«Nada en la letra, la historia o la tradición de la Constitución de EE.UU. daba a los jueces federales no electos la autoridad para regular el aborto. Nos complace que la Corte Suprema de EE.UU. haya corregido este error y haya devuelto el poder para tomar estas decisiones a la gente y a los estados», señaló en un comunicado el gobernador de Misuri, Mark Parson.
En 2019, el estado ya aprobó una ‘ley de activación’ que permitía prohibir el aborto una vez se revoque el fallo del caso Roe contra Wade. Otros 12 estados ya disponen de leyes de este tipo: Arkansas, Idaho, Kentucky, Luisiana, Misisipi, Dakota del Norte, Oklahoma, Dakota del Sur, Tennessee, Texas, Utah y Wyoming.
Dicha ley no establece excepciones para los casos de violación. A partir de ahora el personal médico no está autorizado a realizar abortos, práctica que queda sujeta a responsabilidad penal en el estado —punible con entre cinco y 15 años de prisión—, a no ser que se trate de casos de una emergencia médica.
No obstante, las mujeres que se sometan a un aborto no podrán ser procesadas ni sancionadas.
Las voces en contra del fallo no se hicieron esperar en el estado, como la de la representante para Misuri en la Cámara de Representantes de EE.UU., Cori Bush, que tuiteó: «La atención del aborto es la atención médica. Así fue antes. Y así será después. No queremos lo que dice una Corte Suprema de extrema derecha que está en una crisis de legitimidad. Su fallo racista, sexista y clasista no nos impedirá acceder a la atención que necesitemos».