El presidente francés, Emmanuel Macron, descartó la formación de un Gobierno de unidad nacional para afrontar la división parlamentaria que surgió de las legislativas del pasado domingo y pidió pactos de coalición o puntuales para hacer avanzar el país.
En un discurso televisado a la nación, Macron reconoció el avance de la abstención y la “novedosa” división del legislativo, que priva a su partido de mayoría absoluta para aplicar su programa, pero pidió “una mayoría más amplia y más clara para actuar”.
“Tenemos que legislar de forma diferente”, aseguró el presidente, que apeló a “ampliar” sus apoyos a través de coaliciones con el resto de las fuerzas políticas o con apoyos puntuales a las leyes que presente el Gobierno.
Tras haber recibido a los principales líderes parlamentarios ayer y hoy, Macron se dirigió al país antes de salir al exterior para una serie de cumbres internacionales, que le mantendrán varios días alejado de la primera línea política.
A su vuelta, aseguró, estudiará cómo se posicionan los diferentes partidos frente a su oferta de agregarse, de forma permanente o puntual, a su grupo parlamentario para evitar la parálisis del país.
Los diferentes partidos representados pueden “entrar en una coalición de Gobierno y acción” o “comprometerse a votar algunas leyes”.
“Corresponde a los grupos políticos decidir, con total transparencia, hasta dónde están dispuestos a llegar”, señaló.