De acuerdo a los pronósticos de la entidad, el producto interno bruto (PIB) alemán crecerá este año un 2,5 por ciento, menos que el 3,1 por ciento que se esperaba en marzo.
En cambio, según Ifo, la inflación aumentará con fuerza a un 6,8 por ciento anual, mientras que a comienzos de la primavera europea el instituto preveía un escenario de base de 5,1 por ciento de aumento de precios al consumidor.
El reporte económico señala que dos años después de la irrupción del coronavirus, Alemania sigue en una situación más débil que antes de la pandemia.
«La actividad económica se encuentra actualmente aún un uno por ciento por debajo del nivel previo al coronavirus a finales de 2019», declaró el investigador económico Timo Wollmershäuser en un comunicado de Ifo este miércoles (15.06.2022).
Independientemente del retraso en la recuperación económica, el instituto Ifo sigue a la espera de un mercado laboral favorable a los trabajadores. La entidad prevé que el número de desempleados baje de 2,6 a 2,3 millones este año y la tasa de desempleo del 5,7 al 5,0 por ciento.
El instituto Ifo estima en tanto que en el segundo semestre del año se registrará un descenso gradual de los precios de las materias primas, así como de los cuellos de botella en la oferta.
Wollmershäuser y sus colegas son optimistas de cara al próximo año ya que según sus previsiones el crecimiento económico podría ser muy fuerte, del 3,7 por ciento, mientras que la inflación podría volver a bajar al 3,3 por ciento. (EFE).