Una institución saqueada, quebrada, ahogada en deudas y llena de empleados “fantasmas”, es lo que encontró en la Suplidora Nacional de Productos Básicos (Banasupro), afirma la nueva gerente de dicha institución Aída Reyes.
“Banasupro está totalmente quebrada, la utilizaron para otro fin que no es para lo que fue creada, que era ayudar a nuestra gente para regular precios y nada de eso se ha dado en estos últimos años”, reiteró la funcionaria.
Reyes, detalló que Banasupro está ahogada en deudas y ejemplifico que solo con los proveedores hay una deuda de 200 millones de lempiras, porque ellos dieron sus productos y no se les pagó.
En un mes que lleva en la institución se ha podido deducir que, aunque el Gobierno si le inyectaba fondos a Banasupro, al parecer “el mismo día los drenaban”, agregó.
Asimismo, la gerente dijo que está limpiando las planillas en las que se pagan unos 8 millones de lempiras mensuales y hay muchos empleados fantasmas que nunca nadie los vio y jamás llegaron a marcar.
No obstante, la nueva gerente de Banasupro, exteriorizó que esa es una institución noble y confía en que se puede recuperar con voluntad y trabajando “con manos limpias”.
La Unidad Nacional de Apoyo Fiscal (UNAF) y la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), mantienen una investigación en Banasupro por supuestos actos de corrupción durante la administración como gerente de Luis Colindres en el Gobierno de Juan Orlando Hernández.