En el discurso, Bryant dijo que siempre había estado enamorado de Desiree. Un año después, ella terminó con su esposo y comenzó una relación con él. “Sabía que tenía que ser mía”, dijo Bryant.
El día de la boda es una jornada especial para todas aquellas parejas que sueñan con poder unir su amor a través de los ritos y las ceremonias. Es por eso que, cuando se trata de organizar una fiesta de matrimonio, se requiere mucho esfuerzo para no descuidar los detalles.
Y como en todo evento, pueden suceder cosas inesperadas que no estaban en los planes, como por ejemplo problemas con la comida, la música o las bebidas.
Pero, ¿qué pasaría si ese momento inesperado viene de parte de uno de los invitados esenciales de la boda, como lo es un padrino? Eso ocurrió en 2010, en Illinois, Estados Unidos, en donde un padrino de bodas le declaró su amor a la novia, según informó Daily Star.
Se trata de Bryant White, un amigo muy cercano de una pareja que decidió casarse. De hecho, él fue invitado a la boda por el esposo, de quien había sido compañero desde la escuela secundaria.

Debido a esa cercanía, Bryant terminó siendo nombrado el padrino de bodas, por lo que debía dar un discurso en aquella ceremonia. Ahí fue cuando, frente a todos, dijo que “ella tenía que ser suya” y que “siempre la había amado”.

“Recuerdo el primer momento que vi a Desiree, la amé. Me enamoré de ella. Sabía que tenía que ser mía. Pensé que era la persona más hermosa que había visto en mi vida“, fueron sus palabras.
Tanto la pareja como el padrino de bodas dieron vuelta la página y dejaron ese momento solo como una anécdota. Pero un año después de ese momento, el romance se volvió real: Desiree terminó con su antiguo esposo y comenzó una relación con Bryant.
Tanto la pareja como el padrino de bodas dieron vuelta la página y dejaron ese momento solo como una anécdota. Pero un año después de ese momento, el romance se volvió real: Desiree terminó con su antiguo esposo y comenzó una relación con Bryant.
El romance avanzó tan rápido que solo 2 años después de ese discurso, en 2012, Desiree y Bryant se casaron y ahora tienen cuatro hijos.
El día de la boda, Desiree recuerda que Bryant estaba “muy borracho“. Además, contó que “Bryant entró en la casa de mis padres y se congeló y me miró fijamente (…) Dijo que me veía hermosa. Nunca había tenido un momento en el que él me mirara así
El romance avanzó tan rápido que solo 2 años después de ese discurso, en 2012, Desiree y Bryant se casaron y ahora tienen cuatro hijos.
Ahora la familia vive feliz y tranquila en Illinois, y ya llevan 10 años de matrimonio.