Un hombre llamado Thomas Mansfield, de 29 años, falleció por sobredosis de cafeína tras consumir una bebida en polvo que equivalía a 200 tazas de café en Bodelwyddan (Gales, Reino Unido), informaron este martes medios locales.
El individuo, que trabajaba como guardia de seguridad y entrenador personal, había pedido un paquete de cafeína en polvo a Blackburn Distributions, una empresa de suplementos deportivos, que llegó a su casa el 5 de enero de 2021.
¿Qué sucedió?
La dosis recomendada de esta sustancia, cuyas indicaciones constaban en el envase del producto, es de 60 a 300 miligramos dos veces al día. Sin embargo, cuando el hombre decidió consumir el producto, su báscula digital tenía un peso inicial de dos gramos, por lo que calculó mal la ración.
Según su viuda, Suzannah, Mansfield dio un sorbo a la bebida y luego tomó el resto. Poco después se llevó las manos al pecho y se acostó en el sofá, donde más adelante empezó a botar espuma por la boca, por lo que la mujer salió de prisa en busca de ayuda.
Al cabo de unos minutos, una ambulancia llegó al lugar y los paramédicos constataron que presentaba un ritmo cardíaco «extremadamente anormal», ya que había sufrido un paro cardíaco. A pesar de los intentos de reanimación en el hospital, fue declarado muerto.
«Mi mundo ha sido destrozado»
Tras la respectiva la autopsia, se determinó que la causa del deceso fue la toxicidad por cafeína, ya que el hombre tenía 392 miligramos de cafeína por litro de sangre. La toxicidad de cafeína puede ser causada por niveles de 78 miligramos por litro de sangre o más.
John Gittins, médico forense principal del este y centro de Gales del Norte, registró el fallecimiento de Mansfield como una desgracia debido al resultado no intencionado de sus propias acciones al consumir cafeína en polvo.
«Mi mundo ha sido destrozado y mis hijos han perdido a su papá», escribió Suzannah en las redes sociales. «He perdido al amor de mi vida. Tom falleció en el hospital, la familia se esforzó mucho, pero no fue suficiente», lamentó.