El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, consideró este jueves que la amenaza de invasión de Ucrania por parte de Rusia es «muy alta» y apuntó la posibilidad de que se produzca en «unos días».
Ucrania y separatistas prorrusos se han intercambiado acusaciones de iniciar ataques armados en un distrito oriental de Lugansk en medio de las denuncias de Occidente de que Rusia busca un pretexto para invadir a su vecino, tal y como ha verbalizado la canciller británica al acusar a Moscú de provocar «pretextos para una invasión de Ucrania». «Los proyectiles impactaron en un jardín de infancia», en localidad de Stanitsia-Luganska, y al parecer resultaron heridos dos profesores.
El anuncio del Kremlin del repliegue de tropas a sus cuarteles no es creíble para Estados Unidos, la OTAN y Occidente. De hecho, la administración Biden dice haber «confirmado que en los últimos días, Rusia ha aumentado su presencia a lo largo de la frontera con Ucrania con hasta 7.000 soldados en una fecha tan reciente como hoy», dijo un alto cargo. Rusia «se moviliza para la guerra», dijo.
Mientras tanto, los esfuerzos diplomáticos y las reuniones de alto nivel continúan con el fin de evitar el conflicto armado. Los ministros de Exteriores del Grupo de los Siete (G-7), los países mas desarrollados se reunirán el sábado, y los líderes de la Unión Europea (UE)se reúnen este jueves para abordar la crisis ucraniana.
Rusia volvió hoy a negarse a participar en una nueva reunión convocada a petición de Ucrania por la OSCE por haber informado de todas las actividades efectuadas por las Fuerzas Armadas Rusa mediante el envío de una nota oficial.
