De acuerdo con la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11) de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se ha incorporado la adicción a los videojuegos en la lista de trastornos adictivos.
El documento que entró oficialmente en vigor el pasado 1 de enero de 2022 indica que la adicción a los videojuegos es un patrón de comportamiento “caracterizado por el deterioro del control sobre el juego” a tal punto que muchos priorizan al videojuego por sobre otro tipo de actividades cotidianas.
La Clasificación incorpora el análisis de 1,6 millones de casos clínicos, que pertenecen a 90 países, aunque es una minoría la que desarrolla problemas. Con la inclusión se busca mejorar las estadísticas disponibles sobre la adicción a los videojuegos a nivel mundial.

