Los colores brillantes de una nueva imagen del telescopio Hubble muestran la extraordinaria complejidad, por su forma, de la Nebulosa de los Gemelos, también conocida como Nebulosa de la Mariposa. Este espectáculo celestial está formado por dos lóbulos iridiscentes de material que se extienden hacia el exterior desde un sistema estelar central.
Dentro de estos lóbulos, dos enormes chorros de gas fluyen a velocidades superiores a un millón de kilómetros por hora. Según los expertos, los lóbulos brillantes y en expansión de gas representan las etapas finales de la vida de una vieja estrella de baja masa intermedia. La estrella ha expulsado sus capas exteriores, pero el núcleo remanente expuesto está iluminando estas capas, lo que resulta en un ‘show’ de luces espectacular como el que se ve en la imagen.
La Nebulosa de la Mariposa es un sistema estelar binario, es decir, tiene dos estrellas. Según los astrónomos tienen la misma masa que el Sol, aunque una es algo más grande. Esta última se acerca al final de sus días y ya ha expulsado sus capas exteriores de gas en el espacio, mientras que su pareja ha evolucionado aún más y es ya una pequeña enana blanca. Mientras tanto las alas de la nebulosa todavía están creciendo y, mediante la medición de su expansión, los astrónomos han calculado que la nebulosa se formó hace sólo 1.200 años.