Debido al aumento sin precedentes de los insumos para agricultura, los productores de maracuyá están de brazos cruzados en Olancho.
De 500 lempiras que costaba un insumo, ahora el aumento es del doble, al momento de intentar subirle a la fruta nadie quiere pagarla y por ende no hay venta y es por esa razón que prefieren venderlas dentro del mismo departamento de producción.
La demanda del departamento de Olancho en el consumo de la fruta hace que los mismos no la lleven hasta la capital.