Países Bajos ha decidido sumarse al boicot diplomático a los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022 que se celebran el próximo mes puesto que no se permite la presencia de espectadores neerlandeses, con motivo de las restricciones impuestas por el coronavirus, según ha comunicado una fuente del Ministerio de Exteriores.
Como ya sucediera en los Juegos Olímpicos de Tokio, la presencia de espectadores no está permitida debido a la crisis sanitaria. No obstante, dicha fuente, también ha añadido que enviar una delegación supondría un desafío debido a las «principales preocupaciones» de Países Bajos en relación a la situación de los Derechos Humanos en China, según ha informado la agencia neerlandesa de noticias ANP.
La decisión, tras la reunión este viernes de un Consejo de Ministros, un mes después de que el Ministerio de Asuntos Exteriores anunciara que el rey Guillermo Alejandro no acudiría a la cita debido también a la imposibilidad de asistir del resto de ciudadanos neerlandeses.
El primero en anunciar el boicot diplomático fue el Gobierno de Estados Unidos, cuando en diciembre del año pasado argumentó que no acudiría a los Juegos Olímpicos por las supuestas violaciones de los Derechos Humanos que China estaría cometiendo, por ejemplo, contra la etnia uigur, de minoría musulmana, en la región de Xinjiang.
Poco después se sumó Australia, Reino Unido, Canadá, Japón y Alemania. Tras el anuncio de boicot, Pekín ha acusado a Washington de organizar «una farsa» puesto que «no se había extendido ninguna invitación», y ha pedido que se abstengan «de politizar los deportes y detengan estos «actos erróneos que perturban» los JJOO.