El fiscal de Albany desestimó el martes una acusación contra el ex gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, de que manoseó a una empleada.
La decisión de David Soares, fiscal de distrito en el condado Albany, llega tres días antes de que Cuomo debía responder a la acusación menor en un tribunal.
“Si bien hallamos que la denunciante en este caso fue cooperadora y creíble, tras revisar todas las evidencias, llegamos a la conclusión de que no podremos demostrar la acusación de manera fehaciente en un tribunal”, indicó Soares en un comunicado.
Se expresó “profundamente perturbado” por la denuncia, pero igual pedirá que sea descartada.
La denuncia no nombra a la denunciante, pero esta se ha identificado como Brittany Commisso. Era una asistente ejecutiva de Cuomo hasta que él renunció en agosto, en medio de acusaciones de conducta sexual inapropiada.
Commisso “no tenía control alguno sobre el proceso de cargos penales. No tenía autoridad ni voz en esas decisiones”, afirmó su abogado, Brian Premo, en un comunicado el lunes.
“La única autoridad que ella sí tiene es su empeño en continuar diciendo la verdad y buscar justicia con una acción civil apropiada, lo que hará a su debido tiempo”, añadió.
El ex gobernador no ha comentado al respecto.
El diario Times-Union of Albany fue el primero en reportar la anulación de la acusación.
Commisso ha denunciado que Cuomo le metió la mano en la blusa y le tocó un seno cuando estaban los dos solos en una oficina en la mansión del gobernador en Albany a fines de 2020.
Su testimonio fue incluido en un informe, publicado en agosto por la fiscal estatal Letitia James, que concluyó que Cuomo acosó sexualmente a 11 mujeres. Cuomo anunció su renuncia una semana después de la publicación del informe, que ha atacado como inexacto y parcial.
The Associated Press no identifica a las personas que dicen haber sido agredidas sexualmente a menos que decidan contar sus historias públicamente, como ha hecho Commisso en entrevistas.
Andrew Cuomo, ex gobernador de Nueva York, tampoco enfrentará cargos penales a raíz de las acusaciones de dos mujeres -incluida una policía estatal- de que les plantó besos no deseados en sus mejillas, informó la semana pasada una fiscal de los suburbios. Es la última de una serie de decisiones sobre si las denuncias de acoso y agresión sexual contra Cuomo acabarán en un tribunal penal.
La fiscal del condado de Westchester, Mimi Rocah, dijo que si bien había pruebas para concluir que sí ocurrió la conducta que las mujeres describieron, no podía presentar casos penales por ello. “En ambos casos, mi oficina ha determinado que, aunque las alegaciones y los testigos eran creíbles, y la conducta preocupante, no podemos presentar cargos penales debido a los requisitos legales de las leyes penales de Nueva York”, dijo Rocah en un comunicado.
Con información de AP