Las autoridades sanitarias de Francia han informado este viernes de que la variante ómicron del SARS-CoV-2, detectada en el territorio a principios de diciembre, es ya la dominante en el país, en el marco de una explosión de contagios sin precedentes en la pandemia.
Según los datos proporcionados por Salud Pública Francia, más del 62 por ciento de los positivos en el país europeo se corresponden actualmente con la ómicron, que representaron únicamente el 15 por ciento a mediados de septiembre, recoge BFMTV.
El ministro de Salud francés, Olivier Véran, alertó el 22 de diciembre de que la variante provocaría “la mayoría” de los contagios entre Navidad y Año Nuevo.
Francia ha contabilizado durante los últimos días cifras récord de contagios diarios. Véran señaló que estos números le dan “vértigo” y advirtió de que la situación hospitalaria en el país europeo es “preocupante”.
El Gobierno de Francia anunció el lunes una batería de nuevas medidas para hacer frente al recrudecimiento de la situación de la pandemia, entre las que destaca la imposición del teletrabajo entre tres y cuatro días a la semana durante las próximas tres semanas y el regreso a las clases para el próximo lunes. No obstante, las autoridades francesas han descartado un toque de queda para Nochevieja.
