La capital de India, Nueva Delhi, prohibió el miércoles las celebraciones navideñas y de otro tipo antes del Año Nuevo para contener un posible aumento de la variante ómicron del coronavirus, ya que la ciudad registró el mayor número de casos del país junto con el estado de Maharashtra.
En las últimas 24 horas, el recuento de ómicron en India aumentó a 213, con 13 casos más en 15 estados. Maharashtra, un estado del oeste del país donde los casos de ómicron han aumentado, también aconsejó a la gente que evite las reuniones.
India no ha informado hasta la fecha de ninguna muerte por la variante. Su ministro de Salud ha dicho que la mayoría de casos conocidos son asintomáticos.
La Autoridad de Gestión de Desastres de Delhi dijo en su circular emitida el miércoles que «no se puede celebrar ningún evento cultural/reunión/congregación para festejar la Navidad o el Año Nuevo en el territorio de la capital nacional de Delhi».
La autoridad, cuyo mandato abarca una ciudad en expansión de 20 millones de habitantes, añadió que en los últimos días ha habido un aumento persistente de casos de COVID-19. «Es necesario (…) controlar la propagación de los casos de COVID-19, incluida la variante ómicron».
A última hora del martes, el Ministerio de Salud instó a los estados a prepararse para posibles repuntes de la infección y les dio luz verde para imponer restricciones a las multitudes y a las grandes reuniones, así como a los matrimonios y el trabajo en oficinas.
El gobierno de Delhi también impuso un límite del 50% del aforo en los restaurantes y limitó a 200 el número de personas permitidas en las bodas, según la circular.
El gobierno indio aún no ha decidido si ofrecerá vacunas de refuerzo a los ciudadanos, a pesar de las peticiones de algunos estados y expertos médicos.
