Si tuvieras la oportunidad de renunciar a tu trabajo para navegar por el mundo con tu pareja y tu mascota, ¿lo harías? La respuesta a esa pregunta no la pensaron dos veces los protagonistas de esta historia: una pareja que dejó sus empleos para comprar un barco y viajar en compañía de su perro.
Taryn Pickard, una exprofesora de yoga de 32 años y su esposo Logan, un exmecánico de 36, son originarios de Vancouver, Canadá. Ambos decidieron darle un giro a sus vidas en 2019 cuando durante un viaje por Irlanda vieron que otras parejas vivían en sus botes.
La aventura de encontrar el barco ideal
Ninguno de los dos tenía experiencia en el ámbito de la navegación. Fue entonces cuando decidieron inscribirse en un curso intensivo de cinco días sobre el tema. A partir de ahí se les presentaría una gran cuestión: ¿Qué barco comprar?
El primero les costó 27 mil 500 dólares. Sin embargo, poco les duró el gusto, pues lo vendieron cuando se percataron de que era demasiado pequeño para vivir con todas las comodidades que querían.
En febrero de 2020 adquirieron uno mucho más grande por 65 mil dólares. Pasaron un año adaptándolo para navegar. De nueva cuenta, la suerte no les favoreció, ya que no era capaz de soportar condiciones meteorológicas extremas, un gran problema para ambos y para su perro Max, un Labrador Husky de 10 años.
Apenas en marzo de este año, la pareja y su querida mascota encontraron la embarcación ideal: un velero de acero de 12 metros de 100 mil dólares. Durante la primavera lo acondicionaron y en verano viajaron a través de las islas del archipiélago de Broughton, en Canadá.
De acuerdo con el medio británico Metro, el barco en cuestión tiene dos dormitorios, una cocina, un baño y una gran terraza.
Tenemos un tanque de agua de 600 litros que usamos para cosas esenciales como cocinar y ducharnos a bordo. La pesca es una gran parte de nuestro día. Como la mayoría de las personas, por las tardes vemos Netflix, pero sólo si tenemos servicio, ¡lo que rara vez ocurre!», dijo Logan al portal citado.
¿Cómo pudieron renunciar a sus trabajos y comprar barcos?
La respuesta a esta pregunta es simple: bienes raíces, pues tanto Taryn Pickard como Logan invirtieron en tres propiedades, las cuales vendieron para poder financiar su nuevo estilo de vida.
«En lugar de comprar cosas bonitas e irnos de vacaciones caras, invertimos en propiedades y ahora podemos vivir del dinero que ganamos con eso. Planeamos navegar a Europa en el futuro, pero por ahora estábamos felices explorando la línea costera canadiense», expresó Taryn.