Las redes sociales siempre están llenas de historias tanto divertidas como sorprendentes y hasta inspiradoras, pero esta deja en claro que aunque tengas las posibilidades económicas para comer en un restaurante, si eres codo, vas a sacar el cobre y hacer todo lo que está en tus manos para no pagar ni un centavo.
Hace algunos días se viralizó un video en el que un restaurante denunció cómo una pareja que iba junto a sus dos hijos ponía cabellos en la comida para después reclamar al mesero y así obtener la comida gratis.
¡Ya los exhibieron!
Aunque en el video no se muestra todo lo que sucedió, algunos medios locales que compartieron la noticia mencionaron que el suceso se dio en un restaurante de la Ciudad de México y que fueron las meseras del lugar las que hicieron la denuncia en redes sociales y dejaron al descubierto la clase de personas que se presentaron en el lugar.
Durante el video se puede escuchar cómo una de ellas dice que no es la primera vez que esta familia se presenta en el restaurante y encuentra cabellos en su comida.
La misma familia, exactamente lo mismo, nunca nos había pasado esto. Desde que ellos vinieron en un mes nunca tuvimos un accidente similar y siempre intentamos cuidar la higiene, la manera en la que se sirven sus platos, quienes lo manejan, para que este tipo de incidentes jamás pasen… y no es justo.
Ya les gustó no pagar por la comida
A los meseros no les gusta que este tipo de personas se presenten en el lugar, pues afirman que le dan mala imagen al restaurante y que debido a ellos pierden propinas y, en ocasiones, hasta el pago por su trabajo.
Yo me la paso trabajando todo el día, intento mantener el orden en los platillos, que nada les caiga y pues, la verdad, lo que gano es solo para lo que gasto en mi casa, la renta, pero de lo que más gano es de las propinas.
El mes pasado ellos fueron a comer al restaurante y una de las meseras tuvo que pagar la cuenta de sus propias porque no querían que fuera una mala experiencia para ellos, pero la situación con esta familia ya fue demasiado abusiva.
Ahora están pidiendo ayuda en redes sociales para que se dé con el paradero de estos comensales, pues no quieren que nadie más sufra a causa de ellos. Ojalá esta familia tenga consideración de quienes trabajan y deje de lado sus prácticas.
