Una madre colombiana y sus dos hijos cruzaron la frontera por Yuma y fueron abandonados por el traficante, la mujer y la niña murieron, el menor sobrevivió.
El pasado 26 de agosto, cuando se encontraba en territorio estadounidense la mujer no pudo continuar, se sentía mal y se comunicó al 911. La llamada fue recibida por el Centro de Control, Comando, Comunicación, Cómputo, Coordinación e Inteligencia (C5i) en Sonora. En esta época las temperaturas en el desierto superan los 100°F.
«Por favor ayúdeme…me desmayó», se escucha en el audio que fue compartido con Univision Arizona por C5 Sonora. Atrás se escucha al niño diciendo. «Mamá tengo hambre».
Las autoridades en Sonora activaron de inmediato la geolocalización y coordinaron un operativo con las autoridades fronterizas en Arizona.
Una llamada de emergencia activó la búsqueda
«Tuvimos una llamada de emergencia a la línea 911 en el centro de emergencias de San Luis, Río Colorado, de una mujer que nos manifestaba que estaba internada en el desierto con sus dos hijos», dijo Guadalupe Lares Núñez, coordinadora estatal del C5i en Sonora. Láres dio a conocer el conmovedor caso de esta familia con el propósito de alertar a las personas que intentan cruzar de manera irregular a Estados Unidos, sobre los peligros que enfrentan.
La llamada de auxilio de C5i Sonora fue transferida a la Patrulla Fronteriza en Yuma activando el protocolo binacional. De inmediato se inició la búsqueda, y luego de un intenso trabajo fueron ubicadas sin vida, la madre y su hija de tan solo 11 años.
En ese mismo lugar, a un lado del cuerpo sin vida de la madre, permanecía con vida el niño de 3 años, por lo que rápidamente se le dieron los primeros auxilios y fue trasladado a un hospital de Arizona para su atención médica, donde se encuentra fuera de peligro.
Lares Núñez lamentó lo sucedido al reforzar el llamado para no cruzar de manera irregular a los Estados Unidos y evitar pérdidas humanas.
Las autoridades no han identificado a la familia, pero familiares los identificaron en Noticias Caracol en Colombia como Claudia Marcela Peña, Maria José Sánchez, de 10 años y Cristian Pinzón, de 3.
De acuerdo con la ‘Blu Radio’, Peña y se dirigía a Estados Unidos para encontrarse con su esposo, Hugo Pinzón, quien reside en Florida.
«Ella salió el sábado, 21 de agosto, del Aeropuerto El Dorado con destino a México, el martes en la mañana viajó a Tijuana en avión y ese mismo día, viajó a Mexicali por tierra donde, supuestamente, un ‘coyote’ las iba a llevar a la frontera”, explicó Yeni Acevedo, prima de la víctima, a la cadena radial.
Según el reporte de C5i Sonora, Peña acompañada de sus dos hijos ingresó caminando por Mexicali, Baja California, luego de que el traficante, según alcanzó a comentar en su llamada a la línea de emergencias, los había abandonado a su suerte.
Las autoridades en Sonora hacen un llamado a los migrantes para que no esperen a no tener líquidos, comida o batería en sus teléfonos móviles para solicitar ayuda al 9-1-1.
