El máximo funcionario de seguridad pública de Denver dijo estar dispuesto a disciplinar a los policías, agentes del sheriff y bomberos que desacaten la orden de que todos los empleados de la ciudad deben vacunarse contra el COVID-19.
El departamento de salud de la ciudad emitió el lunes una disposición de sanidad pública que obliga a todos los empleados de la ciudad a recibir la segunda dosis de sus vacunas a más tardar el 15 de septiembre y a mostrar que fueron inoculados.
“Esa orden señala que los empleados de la ciudad deberán estar vacunados. Si nuestro personal no la acata en el periodo designado por la oficina del alcalde y el Departamento de Salud Pública y Ambiente, entonces estoy dispuesto a hacer lo que sea necesario para obligarlos a que la cumplan y a que rindan cuentas”, dijo Murphy Robinson, director ejecutivo del Departamento de Seguridad Pública de la ciudad, ya que “ese es mi trabajo”. Tomado de AP