La vocación por un empleo no es algo que se enseñe en las escuelas, pero sí es algo que se lleva en el corazón y se desarrolla con el paso del tiempo. Prueba de esto es el incesante trabajo de Lilia María Rivera Morales, de 89 años, quien a pesar de la crisis sanitaria y de su avanzada edad, sigue impartiendo clases a menores de Puerto Rico.
Pero esto no es todo. La maestra Lilia creó su propio método de enseñanza, ayudando a que cientos de niños no solo aprueben sus materias, sino que también adquieran un conocimiento de manera sencilla y divertida. Esto la hizo merecedora del respeto de todo internet.
Lilia María Rivera Morales, originaria de Barranquitas, Puerto Rico, se pudo haber jubilado en la década de los 90. Sin embargo, decidió seguir trabajando y compartiendo sus conocimientos sin importar su avanzada edad. Durante la pandemia de covid-19 tuvo que aprender a usar las nuevas tecnologías y adaptarse a las clases en línea, algo que no fue sencillo pero que le permitió tener un poco de tiempo libre.
En ese tiempo escribió y detalló de manera explícita el método de enseñanza que usa desde 1973 y con el que ha alfabetizado a cientos de niños. Este se basa en la escucha y observación de la fonética de las letras y, lo más importante, da especial atención a las necesidades de cada alumno, centrándose en sus virtudes, aptitudes y habilidades para generar confianza, así como un buen ambiente que les permita expresar sus dudas y participar.
Lilia ha trabajado sin descanso durante 60 años, le ha ensañado a leer a varias generaciones de su país y también ha sido directora de varios colegios. Además, ha adquirido nuevos conocimientos como el idioma inglés y francés, algo que era un sueño para ella.
Su dedicación y esfuerzo nos inspira a dar lo mejor de nosotros y comprueba con exactitud que los límites no existen.
