La selección mexicana de fútbol comenzó el jueves su participación en los Juegos Olímpicos de Tokio con una contundente victoria por 4-1 sobre Francia, en un encuentro en el que Diego Lainez, pese a no marcar, acaparó todos los focos con su sobresaliente actuación.
En un partido en el que ambos conjuntos parecieron más cómodos en la recuperación del balón que en la construcción del juego, el atacante Diego Lainez fue el encargado de poner el toque diferencial.
De hecho, las dos mejores ocasiones del conjunto mexicano en la primera parte llegaron gracias al talento que atesora el jugador del Betis.