Debido a los constantes incrementos a los precios de los carburantes a nivel internacional, se ve afectada la economía hondureña a nivel nacional.
El año pasado se tuvo un decrecimiento económico de del 10 % siendo ese porcentaje algo fuera de serie e incluso mayor que lo que se tuvo cuando el huracán Mitch.
La actividad económica está volviendo poco a poco, pero no se puede decir que se está alcanzado los niveles que se tenían previo a la pandemia.
El combustible es uno de los detonantes y que va de la mano con la actividad económica.