Bajo sospechas de la Covid-19 fallece el sacerdote Marco Aurelio Lorenzo, de las parroquias de los municipios de San Marcos y Petoa, en el departamento de Santa Bárbara.
El sacerdote declinaba a usar mascarillas y otras medidas de bioseguridad, para protegerse del mortal virus, sin embargo, este le habría arrebatado la vida.
El cura era muy querido entre la feligresía por el apoyo que aportaba a las personas de bajos recursos económicos.