Una difícil situación es la que viven los vendedores frutas, golosinas, agua y demás, que se ubican en la calle contiguo al Hospital Roberto Suazo Córdova en La Paz.
Lo que ocurre es que las autoridades municipales les solicitó que al terminar su venta en el día, deben dejar limpio y sin rastros de materiales o mercadería el lugar, en punto de las 5:00 p.m.
Ante este llamado, los vendedores solo ruegan que les permitan trabajar, y que no los desalojen violentamente si se pasan unos minutos de las cinco de la tarde.