“La COVID-19 no puede verse aislado de los problemas fundamentales de nuestros sistemas de salud. Con los sistemas de atención primaria de salud adecuados, nos recuperaremos más rápidamente de esta pandemia y evitaremos la siguiente antes de que se produzca. La comunidad internacional debe aumentar la cooperación internacional, así como la capacidad de respuesta ante el virus y en ello a adoptar una lógica de guerra para detener la pandemia”, resaltó este lunes el secretario general de Organización de las Naciones Unidas (ONU) António Guterres.
Las declaraciones fueron ofrecidas durante su participación en la 74° Asamblea Mundial de la Salud la cual está enfocada en la urgencia de poner fin a la actual pandemia y prevenir la próxima construyendo un mundo más sano, seguro y justo.
“Los sistemas sanitarios no pueden atenderse de manera aislada, la desigualdad, falta de financiación, complacencia, negligencia solo se recuperan si actuamos como un solo mundo, por ello debemos trabajar con el compromiso para transformar los sistemas actuales, la ONU está comprometida en aportar recursos sostenibles y previsibles en la cooperación internacional. Los sistemas primarios son el punto de partida pero el mundo necesita un compromiso transformar los sistema actuales en un sistema coordinado para conseguir la recuperación y lograr los objetivos del desarrollo sostenible”, dijo.
De igual forma, pidió al G20 que implemente un grupo de trabajo que agrupe a todos los países que disponen de capacidades de producción de vacunas, así como a la OMS e instituciones financieras internacionales capaces de tratar con las empresas farmacéuticas y otros actores esenciales del sector esto con el fin de que el acceso a las vacunas contra la COVID-19.
“La distribución de vacunas debe ser equitativo, debemos reforzar las capacidades de los países, el objetivo es duplicar la capacidad de fabricación, agrupar patentes y abordar la distribución equitativa de vacunas. La COVID-19 no se puede ir luchando de país a país todos debemos unirnos”, agregó.
La Asamblea de la Salud, que es el máximo órgano decisorio de la OMS, cuenta con la participación de delegaciones de todo el mundo, la cual se celebra desde este lunes 24 de mayo y hasta el 1 de junio de 2021 bajo el formato virtual.
En el último año, los casos de COVID-19 se han multiplicado por 40 hasta alcanzar los 162 millones en todo el mundo, mientras que el número de muertes se ha multiplicado por 11 hasta superar los 3,3 millones.
La pandemia ha golpeado duramente a todos los países, pero su impacto se ha dejado sentir más en aquellas comunidades que ya eran vulnerables, que están más expuestas a la enfermedad, que tienen menos probabilidades de tener acceso a servicios de atención de salud de calidad y que tienen más probabilidades de sufrir consecuencias adversas (como la pérdida de ingresos) como resultado de las medidas aplicadas para contener la pandemia.
