Sumamente preocupados se encuentran los campesinos en los bordos del Río Chamelecón, pues nada que arreglan los estragos que dejaron las tormentas ETA e IOTA.
¡Más acción y menos palabras!, es lo que piden dichos campesinos, ya que les prometen y prometen y no les cumplen.
Por otra parte, manifiestan que debido a la difícil situación económica, muchos de los pobladores del sector han migrado.