Una residente de la ciudad polaca de Cracovia llamó recientemente a la Sociedad Protectora de Animales para advertir de la presencia de una extraña «criatura» de aspecto peligroso que llevaba dos días colgando de un árbol cerca de su casa.
La entidad relató en una publicación de Facebook que la mujer llamó «desesperada» y les pidió que acudieran a investigar al raro animal que parecía esconderse en un árbol. «La gente no abre las ventanas porque tiene miedo de que entre en sus casa. Todo el mundo le tiene miedo«, argumentó la vecina, que describió al animal como una especie de «iguana» de color «marrón».
Tras descartar que se tratara de una broma atrasada del Día de los Inocentes, los inspectores decidieron desplazarse al lugar, si bien dudaban de la presencia de algún tipo de reptil en las calles en esta época del año.
Tras una corta búsqueda, el equipo encontró a la «criatura» tal y como había sido descrita, con su «piel morena brillando al sol». Cuando la observaron más de cerca comprobaron que, efectivamente, «la pobre no tenía patas ni cabeza», pues resultó ser un cruasán de hojaldre.
Probablemente, el bollo se quedó enganchado en la rama del árbol, luego de que alguien lo arrojara por la ventana para alimentar a los pájaros.
La Sociedad Protectora de Animales polaca asegura que la historia es completamente verídica y animó a las personas que los sigan contactando con ellos ante cualquier caso sospechoso de bienestar animal. «Es mejor comprobarlo y decepcionarse gratamente y (muy pocas veces) reírse, que no reaccionar, lo que a veces puede llevar a una tragedia», reflexionan.
