La designación del diputado Martín Soria como ministro de Justicia de Argentina afianza la decisión del Gobierno de avanzar en una polémica reforma judicial que el oficialismo ve clave para acabar con la politización de los jueces pero que la oposición cree que busca la impunidad de la vicepresidenta, Cristina Fernández, en sus causas por corrupción.
Tras más de una semana de incertidumbre, después de que Marcela Losardo renunciara como titular de la cartera, el presidente Alberto Fernández confirmó en la noche del lunes los rumores que venían ubicando en el cargo a Soria, abogado de 45 años, legislador desde 2019 y exintendente de la localidad patagónica de General Roca.