La Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado (FESCCO), a través de la Sección Antiextorsión, en las últimas semanas reporta condenas de más de 13 años de prisión contra miembros de bandas organizadas por diferentes delitos.
Se trata Henry Alberto Quiñonez, a quien el órgano jurisdiccional le impuso una pena de 13 años de prisión por los delitos de atentado, asociación para delinquir y porte ilegal de arma de uso prohibido, mientras que Obed Gabriel Almendáres lo condenaron a una pena de 10 años de prisión por atentado y tráfico ilícito de drogas.
Del mismo modo, a Jairo Colindres Hernández, en audiencia de estricta conformidad se le dictó una pena de 10 años de prisión por extorsión en perjuicio de testigo protegido.
También condenaron a Ángel René Girón Salmerón, supuesto miembro de la Pandilla 18, por el delito porte ilegal de arma de uso comercial.
Igualmente, a Ericsson Fernando Meza Rodríguez, Daniela Alejandra Ponce Ártica, Manuel Alexander Alvarado Rodríguez, David Alfredo Soto Sanders, Alex Daniel Gómez Domínguez, Jonathan Josué Zúniga Suazo y Josué Adolfo Medina Rosales fueron condenados por el delito de extorsión en perjuicio de testigos protegidos.
Los hechos ocurrieron en las colonias Suyapa, Villafranca, Ojo de Agua, y Cerro Grande de la capital.
En otras causas, Fiscales de Antiextorsión en audiencia inicial obtuvieron Auto de Formal Procesamiento con Prisión Preventiva en contra de Cristian Ariel Gómez Martínez y Rafael Edgardo López Ramos por considerarlos responsables del delito de extorsión continuada.
Asimismo, contra supuestos miembros de la pandilla 18, Edward Anderson Núñez Solís y José Alexander Lazo Pineda, a quienes los acusaron por los delitos de extorsión y porte ilegal de arma de fuego de uso permitido.
Finalmente, se presentaron cuatro Requerimientos Fiscales en contra de Erik Alexander Amador Hernández Henríquez, Samaria Nicol Cáceres Banegas, Óscar Levith Padilla Ramos y Santos Ariel Martínez Rodríguez por el delito de extorsión.
Los hechos presuntamente cometidos por los procesados acontecieron en las colonias Villanueva, Peña por Bajo y Prados Universitarios de Tegucigalpa.
