El tendón de Aquiles lleva toda la temporada dándole problemas a Anthony Davis. Al principio el equipo pensó en tratar la dolencia con descansos puntuales que le permitiesen seguir jugando; sin embargo, ya han entendido que es momento de parar.
Según Adrian Wojnarowski de ESPN, los Lakers esperarían dos o tres semanas para volver a evaluar el estado de su jugador, a quien las pruebas le diagnosticaron una distensión en la pantorrilla.
“Queremos tratar de dejar esto completamente atrás y ser conservadores con su lesión para asegurarnos de que esté completamente recuperado antes de que regrese”, explicaron los Lakers en declaraciones reseñadas por el portal Nbamanics.
Se espera que en estas cuatro semanas Davis lleve a cabo su rehabilitación, se recupere plenamente y pueda ir aumentando el trabajo en los entrenamientos hasta estar listo para volver a la acción.