Agentes de los cuerpos de inteligencia han dado a conocer que los capturados se encargaban del traslado de miembros de la pandilla de un sector a otro para cometer diferentes ilícitos entre ellos cobro de extorsión, venta de drogas y homicidios.
Según las investigaciones los capturados eran los responsables de generar el cobro indiscriminado de extorsión tanto a pequeños comercios así como varios puntos de transporte en la ciudad, así mismo en la planificación de atentados armados.
Dentro de los capturados se encuentra un conductor de taxi quien fungía como ranflero de la pandilla 18 para la comisión de la extorsión y atentados armados.