Portugal se prepara para un nuevo confinamiento general, que se decretará la próxima semana para al menos 15 días, después de que los contagios de covid-19 se hayan disparado tras las fiestas navideñas. El miércoles se superaron los 10.000 casos por primera vez, con un aumento significativo respecto al anterior máximo (unos 7.600 positivos), y desde entonces las cifras se han mantenido en torno a ese nivel.
En España, la borrasca Filomena ha obligado al servicio sanitario de Madrid a suspender la vacunación contra la covid-19 este fin de semana, ante las peticiones de evitar salidas por la fuerte nevada que ha dejado una cota de nieve de hasta 50 cm de nieve en la capital. El Ministerio de Sanidad ha sumado este viernes 25.456 nuevos contagios, el segundo peor dato de toda la pandemia. También se han sumado 199 fallecidos al recuento oficial. La incidencia acumulada ha subido 29 puntos en 24 horas y se sitúa en 350 casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días. En total 2.050.360 personas se han contagiado y 51.874 han muerto desde el comienzo de la pandemia, según los datos oficiales que facilita Sanidad.
Varias comunidades están tomando medidas restrictivas ante el aumento de casos de covid-19 tras las navidades. Andalucía ha decidido mantener el cierre perimetral de la región y ha adelantado el toque de queda a las 22.00. La Comunidad de Madrid, por su parte, ha extendido las restricciones de movilidad a 41 zonas básicas de salud y 14 localidades. Galicia alargará todo enero el cierre perimetral y endurece las medidas en residencias y hostelería.
El Reino Unido ha registrado este viernes nuevos máximos con 68.053 contagios y 1.325 muertes en el último día. El órgano regulador del país ha dado luz verde al uso de la vacuna del laboratorio estadounidense Moderna, aunque no estará disponible hasta primavera. Es la tercera autorizada en el país, junto con la de Pfizer-BioNTech y AstraZeneca-Oxford.
