El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, informó que propondrá al actual secretario de Educación, Esteban Moctezuma, como el próximo embajador de México en EE.UU. para suplir a la diplomática Martha Bárcena, quien anunció su retiro prematuro del servicio exterior.
«He decidido, en el marco del cambio de Gobierno de EE.UU., nombrar a Esteban Moctezuma, él va a ser el próximo embajador de México en EE.UU.», dijo López Obrador en su conferencia matutina del 16 de diciembre.
El nombramiento del presidente será enviado al Senado para que sea ratificado.
López Obrador agregó que Moctezuma permanecerá en su cargo como secretario de Educación hasta finales de 2020.
La llegada de Moctezuma a la embajada se produce luego de que se hiciera oficial el triunfo de Joe Biden en las elecciones presidenciales de EE.UU. y Obrador enviara una carta de felicitación al presidente electo.
Tensiones diplomáticas
En la última semana, Bárcena anunció su retiro durante un evento realizado en el Baker Institute de la Universidad de Rice, en Houston, Texas.
«Me voy a jubilar en los próximos meses después de haber trabajado por 43 años en el Servicio Exterior», dijo. «Mi estadía en EE.UU. ha completado una etapa en la que he servido a mi presidente y a mi país por encima de todo, con fidelidad, lealtad, y es tiempo de ir a otra etapa de mi vida», apuntó.
López Obrador reconoció el trabajo de Bárcena, a quien propuso nombrar como embajadora emérita, como distinción por su trayectoria profesional.
El retiro de Bárcena se dio a conocer luego de que en la prensa mexicana se ventilaran las diferencias y choques entre la embajadora y el canciller Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Un enfriamiento de la relación que llevaba meses, pero se agudizó en las últimas semanas tras la elección presidencial en EE.UU. y las tensiones tras la detención en el aeropuerto de Los Ángeles, California, del exsecretario de la Defensa Salvador Cienfuegos, acusado de narcotráfico, aunque posteriormente fue liberado para ser procesado en México.
Dicha detención motivó la molestia del Gobierno mexicano y provocó que López Obrador enviara al Congreso una reforma de ley para acotar la actuación de las agencias estadounidenses en territorio mexicano, principalmente a la DEA (agencia antidrogas estadounidense), lo cual a su vez generó malestar en Washington.
