A partir de una cierta edad, por lo general, entre los 45 y 55 años, las mujeres comienzan a atravesar una multiplicidad de cambios físicos y hormonales. Este proceso se conoce como menopausia y se caracteriza por una disminución natural de las hormonas reproductivas. Además, la menstruación comenzará con desarreglos en la cantidad y la periodicidad del sangrado. Pero, a su vez, sucede que cerca del 1 por ciento de la población femenina mundial experimenta este proceso de forma prematura. Antes de los 40 años.
Debido a los cambios hormonales, tales como sudores nocturnos, calores, sequedad vaginal, insomnio, irritabilidad, disminución del apetito sexual, entre otros, una mujer puede llegar a aumentar de peso. Sucede porque, durante el período menopáusico, las hormonas sexuales, especialmente los estrógenos, caen significativamente. Los ovarios se atrofian y dejan de producir hormonas. Y, en este caso, finaliza el período de madurez sexual: la etapa reproductiva.
“Estos cambios hormonales son, en parte, responsables de la alteración del metabolismo de la mujer. Lagrasa se empieza a acumular en la cadera y el abdomen”, explica a Con Bienestar el doctor Eduardo González Fabrizzi (M.N. 50.297), médico ginecólogo.
El especialista, además, hace hincapié en que este aspecto no siempre es la única causa del aumento de peso: “La edad, la modificación en el hábito alimentario, la disminución de la actividad física, entre otras causales, contribuyen a que el físico de la mujer comience a sufrir cambios”.
El aumento de peso, además de ser un factor producto del cambio hormonal, puede estar asociado a modificaciones en la densidad ósea. Y, con esto, conllevar a limitaciones osteoarticulares. “La descalcificación provoca mayor riesgo de sufrir caídas y fracturas”, dice el médico. Y, a su vez, González Fabrizzi señala que se debe prestar especial atención a los trastornos cardiovasculares“por alteración del colesterol. Los triglicéridos también deben ser vigilados clínicamente. Toda medida de prevención cumple un rol importante en el manejo de este grupo de mujeres”
Recomendaciones
El paso de los años es inevitable. Tarde o temprano, una mujer atravesará este proceso. Es inminente el aumento paulatino de peso pero, sí existen algunos consejos para tratar de regularlo.
“Lo recomendable va asociado desde el inicio de la aparición de los primeros síntomas a la terapia hormonal de reemplazo”, cuenta el especialista. Asimismo, González Fabrizzi explica que se deben “evaluar antecedentes de patologías mamarias u otras hormonodependientes. Mantener una dieta adecuaday la actividad física, son dos medidas recomendables asociadas”, concluye el ginecólogo.