El Vaticano anunció este jueves que el papa Francisco suspendió nuevamente sus audiencias generales de los miércoles en presencia de fieles, a raíz del rebrote de coronavirus en Italia.
“A partir del próximo miércoles 4 de noviembre, las audiencias generales del Santo Padre comenzarán a ser transmitidas desde la biblioteca del Palacio Apostólico. Esta decisión fue tomada porque se detectó un caso positivo de COVID-19 en la audiencia general del 21 de octubre, y con el objetivo de evitar cualquier posible riesgo futuro para la salud de los participantes”, indicó el Vaticano en un breve comunicado.
Las audiencias generales habían sido suspendidas el pasado 7 de marzo, cuando en Italia se decretaron las primeras medidas de confinamiento debido al inicio de la pandemia por coronavirus.
Francisco siguió llevando a cabo tanto las audiencias como el rezo del Ángelus dominical desde la Biblioteca del palacio pontificio, donde ahora volverán a celebrarse.
Ayer, durante la audiencia en el aula Pablo VI, sólo se admitió a pocos fieles y el papa Francisco se disculpó por no poder saludarlos debido a las medidas impuestas para evitar contagios.
Durante los encuentros pasados, el papa Francisco, en algunas ocasiones, tuvo que que solicitar a las personas que no se agolparan durante los saludos y que permanecieran en sus asientos respetando el distanciamiento.
El pontífice siempre ha aparecido sin tapabocas en estas audiencias, así como sus colaboradores y los obispos presentes que lo saludan tras el acto.