El presidente de Bielorrusia, Alexánder Lukashenko, ha tachado este miércoles a Polonia, Lituania, República Checa y Ucrania de ser «satélites» de EE.UU. que ayudan a Washington a desestabilizar su país.
Según declaró el mandatario en una reunión con activistas políticos bielorrusos, EE.UU. y estos cuatro países —a los que tachó de «agresores»— comenzaron a preparar los acontecimientos actuales en Bielorrusia hace diez años.
«Ahora podemos mirar hacia atrás y analizar en detalle todas las etapas del escenario de destrucción de nuestro país, que, afortunadamente, no hemos permitido ni permitiremos que se realice», aseguró Lukashenko, quien indicó que «las tácticas de los organizadores se basaron en el clásico libro de texto estadounidense de revoluciones de color».
Según el presidente, en los últimos años, su país se ha desacostumbrado de «la política hostil» de sus vecinos, pero «su esencia antibielorrusa» no ha desaparecido y se ha manifestado ahora «en su totalidad», llegando a atentar contra la «soberanía e incluso la integridad territorial» de Bielorrusia.
Lukashenko también acusó a los estrategas extranjeros de intentar «sembrar discordia en los estados de ánimo de la élite estatal y probar su lealtad al presidente».