El opositor ruso Alexéi Navalny no pudo ser envenenado con el agente nervioso Novichok, ya que de haber sido así, hubiera muerto a las pocas horas de ser ingresado en el hospital, ha declarado este martes a periodistas Alexánder Sabáyev, el toxicólogo jefe de la provincia rusa de Omsk, donde fue atendido de emergencia el político después de que se sintiera mal durante un vuelo el 20 de agosto.
Además, el médico ha subrayado que en el organismo de Navalny no se hallaron rastros de ninguna sustancia del grupo Novichok.
Sabáyev ha explicado que en caso de intoxicación por compuestos organofosforados —uno de los cuales es Novichok— «es imposible salvar a una persona sin un procedimiento de ultrahemodiafiltración». «No utilizamos este procedimiento porque no había indicaciones para ello. Es decir, no hubo envenenamiento, eso es todo», ha aseverado.
Si Navanly hubiera sido envenenado con Novichok, «habría muerto en las primeras horas«. «Estrictamente hablando, hacia las 18:00 o 22:00 de la noche ya habría muerto. La intoxicación por organofosforados es muy grave, fatal«, ha puntualizado el toxicólogo jefe.