Dos jóvenes hondureños que respondían a los nombres de Wilmer Rodríguez (de 17, años) y Jaerson Álvarez (18) murieron ahogados el fin de semana en el río Trinity en el condado de Liberty, en Texas, tratando de rescatar a una niña de 5 años que se ahogaba.
Según relato de la local ABC, los hondureños pasaban el día libre el sábado, haciendo un asado, cuando se internaron en las aguas tratando de sacar a una menor cuya familia gritaba desesperada por ayuda.
Según ABC, el padre de la niña, llamado Ariel Nieto, dijo que ninguno de los dos muchachos sabía nadar, pero nadie sospechaba que las aguas de este río eran realmente profundas.
Autoridades de Liberty dijeron que en las aguas de ese río hay agujeros de entre 40 y 50 pies (12 y 15 metros), además de remolinos y corrientes rápidas.
Hondureños organizados en Texas, dijeron que Rodríguez y Álvarez, eran jóvenes trabajadores, que laboraban 6 días a la semana y que dedicaban casi todos sus esfuerzos por mandar dinero a sus familiares en Honduras, país donde radicaban sus madres y hermanos. Ambos hondureños llegaron a Estados Unidos siendo aún más jóvenes.
La misma comunidad hondureña ahora está en búsqueda de fondos para repatriar los cuerpos al país centroamericano.
