Francisco Castillo, un sujeto con supuestos problemas mentales estaba a punto de prenderse fuego dentro de un automóvil cuando los elementos policiales llegaron a la escena evitando la acción.
Castillo muy molesto denunció que habían personas que le querían hacer daño y que de hecho lo mandaron a golpear con miembros de pandillas.
«Préstame un fósforo, préstame un fósforo», pedía el sujeto, que estaba empapado de gasolina y había rociado el automóvil también del liquido inflamable. ER