«Históricamente no se había registrado un crimen masivo en una cárcel de mujeres en Honduras, este es el primero» fueron las palabras con las que la defensora de los derechos humanos, Sandra Zambrano se refirió al amotinamiento en la cárcel de mujeres.
Además dijo que las organizaciones de derechos humanos están obligadas a velar para que se cumplan las medidas de seguridad para las privadas de libertad, y que el Estado está llamado a brindarlas.
«El estado debe de preveer una mejor calidad de vida para los privados de libertad» dijo recalcando que las mujeres que perdieron la vida estaban únicamente detenidas, no habían sido sentenciadas.SA