Si creías que los jeroglíficos egipcios eran confusos, espera hasta que veas este código vikingo, que tardó 1.200 años en descifrarse y aparentemente nos advierte sobre el calentamiento global.
El código secreto está inscrito en losas de granito que datan de hace cientos de años, y se cree que la codificación predice el cambio climático y profetizó el fin del mundo.
El granito se encuentra en Suecia y se cree que data del año 800 d. C., ya que hace referencia al emperador Teodorico el Grande, rey de los ostrogodos, y gobernante del reino ostrogótico independiente de Italia entre 493–526.
Si bien las líneas sobre la roca pueden parecernos simples garabatos, un equipo de investigadores, dirigido por el profesor Per Holmberg de la Universidad de Gotemburgo, ha estado intentando descifrar el antiguo código
En un diario publicado por la Universidad de Uppsala, se explica que el estudio propone que la inscripción aborda una ansiedad provocada por la muerte de un hijo y el miedo a una nueva crisis climática, similar a la catastrófica después de 536 dC que mató al 50% de la población de Escandinavia.
El 536 dC ha sido denominado “el peor año para estar vivo”, con el planeta atacado por la hambruna, las enfermedades y la niebla extrema. Escandinavia fue golpeada por el hambre, perdiendo más de la mitad de su población debido a la hambruna o la partida de personas para buscar comida.
Se escribieron nueve acertijos en la piedra, cinco de los cuales se referían al sol y los otros cuatro al dios nórdico, Odin.
El mensaje también hablaba de Teodorico el Grande, un rey que reinó durante más de 50 años en la Edad Media, y cuya regla se consideró un mal presagio. Después de su muerte el 30 de agosto de 526, una serie de volcanes estallaron en toda Europa, hundiendo el continente en la oscuridad y destruyendo cultivos.
Estas leyendas vivieron a través del folklore, y muchos temían la miseria que una vez más podría regresar a su tierra. Los científicos creen que trescientos años después, Varin, un guerrero vikingo, fue influenciado por los presagios de Teodorico, y los vio reflejados en el cielo después de la muerte de su hijo.
Finalmente, Varin fue testigo de un eclipse solar que envolvió el cielo, tornándolo rojo, y un invierno helado que mató sus cultivos. El guerrero vikingo escribió lo que vio en una losa de piedra.
Los científicos creen que la piedra podría referirse a una “batalla contra el clima”, con el guión codificado que hace referencia a condiciones meteorológicas severas.
