
Un complejo de apartamentos estuvo a punto tomar fuego cuando uno de los inquilinos dejó en el fuego una olla de frijoles.
Los residentes en el complejo sintieron el olor a quemado y llamaron al 911 para dar la alerta, a los pocos minutos una unidad de bomberos llego al lugar donde tras abrir la puerta logró comprobar que se trataba de una olla de frijoles la que ya se había quedado seca y estaba a punto de provocar un incendio.
Los elementos del cuerpo de bomberos procedieron a desconectar la estufa y realizar la revisión del inmueble para evitar conflagración.ER